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El nuevo gabinete, el tercero de la Monarquía, y el primero legítimado por las urnas desde  el 16 de febrero de 1936, fue una amalgama de las distintas corrientes que componían la Unión de Centro Democrático- UCD. Hubo un solo militar: el teniente general Gutiérrez Mellado, persona de talante moderado, por supuesto de origen franquista pero de talante demócrata, que fue nombrado  Vicepresidente del Gobierno y Ministro de Defensa. 

Las otras dos vicepresidencias fueon respectivamente a Enrique Fuentes Quintana (economía) y a Fernando Abril Martorell (asuntos políticos), ambos altos funcionarios en tiempos de Franco y ahora políticamente independientes, sin duda moderados y los dos senadores designados por el Rey. 

Otros ministros fueron Francisco Fernández Ordóñez (Hacienda), socialdemócrata que tendría una impresionante carrera política, Alberto Oliart (Industria y Energía), independiente, muy estimado por el Rey como se verá más tarde, Joaquín Garrigues Walker (Obras Públicas), empresario liberal integrado a la UCD y Landelino Lavilla (Justicia), ya ministro en el anterior Gobierno y por lo tanto senador por designación del Rey.

Los objetivos principales de las Cortes recién elegidas fueron dar una solución a la dramática situación económica y social del país y elaborar una Constitución democrática.

Enrique Fuentes Quitana, Vicepresidente asustos económicos y Francisco Fernández Ordoñez, Hacienda

Enrique Fuentes Quitana, Vicepresidente asustos económicos y Francisco Fernández Ordoñez, Hacienda

Primer Gobierno de la Democracia, formado pro Suárez el 5 de julio de 1977

Primer Gobierno de la Democracia, formado pro Suárez el 5 de julio de 1977

General Manuel Gutierrez Mellado, Vicepresidente  y Ministro de Defensa en el Primer Gobierno Democrático

General Manuel Gutierrez Mellado, Vicepresidente y Ministro de Defensa en el Primer Gobierno Democrático

Landelino Lavilla, Ministro de Justicia

Landelino Lavilla, Ministro de Justicia

Fernado Abril Marorell, vicepresidente asustos políticos

Fernado Abril Marorell, vicepresidente asustos políticos

Don Juan Renunció a sus derechos dinásticos.

D. Juan de Borbón lee el discurso de renuncia ante los Reyes

D. Juan de Borbón, hijo del Rey Alfonso XIII y padre del Rey Juan Carlos I, nunca fue Rey, titulado Conde de Barcelona, el régimen franquista le mantuvo apartado de los círculos de poder, no siendo reconocidos sus derechos dinásticos al ser nombrado como sucesor de Franco en la jefatura del Estado, su hijo Don Juan Carlos. Este nombramiento supuso un distanciamiento temporal entre Don Juan de Borbón y su hijo.

Tras la muerte de Franco y la subida al trono de su hijo Juan Carlos,  que utilizó durante el franquismo el título de Príncipe de España, D. Juan, renunció a sus derechos dinásticos a la Corona Española en favor de su hijo, en un acto que tuvo lugar  el 14 de mayo de 1977 en el Palacio de La Zarzuela.

La situación económica: Los Pactos de la Moncloa.

 

 

Firma de los Pactos de la Moncloa, en 1977. De izquierda a derecha: Enrique Tierno, Santiago Carrillo, Josep María Triginer, Joan Raventós, Felipe González, Juan Ajuriaguerra, Adolfo Suárez, Manuel Fraga, Leopoldo Calvo Sotelo, Miquel Roca.

Los Pactos de la Moncloa fueron un acuerdo entre todas las fuerzas políticas parlamentarias para intentar arreglar la desastrosa situación económica. La economía fue el punto más débil de la transición:

La inflación estaba a niveles casi sudamericanos: del 20% de 1976 se pasó a mediados de 1977 al 44%, frente al 10% de promedio de los países de la OCDE.

Las empresas estaban endeudadas en centenares de miles de millones de pesetas, lo 

Firma de los Pactos de la Moncloa, en 1977. De izquierda a derecha: Enrique Tierno, Santiago Carrillo, Josep María Triginer, Joan Raventós, Felipe González, Juan Ajuriaguerra, Adolfo Suárez, Manuel Fraga, Leopoldo Calvo Sotelo, Miquel Roca. 

 

cual contribuía a que el paro estuviera disparado. Las exportaciones cubrían el 45% de las importaciones, el país carecía de recursos para mantener sus intercambios con el exterior y perdía 100 millones de dólares diarios de reservas exteriores.

 

Las medidas de saneamiento a corto plazo fomentadas por el "Pacto de la Moncloa" fueron:

  • una política monetaria que frenase la expansión de la masa monetaria,

  • una política presupuestaria que redujese el déficit público,

  • la fijación de un cambio de la peseta realista que redujese la deuda exterior.

  • obligación de incrementar los salarios en base a la inflación prevista y no a la pasada, con el objetivo de que los salarios no aumentasen más de un 22% como promedio en 1978 respecto a 1977: se pidió a los trabajadores que se apretasen el cinturón, una vez más.

  • Contra el paro se presentaron una serie de normas que permitieron la contratación temporal, sobre todo de jóvenes que no habían accedido nunca a un puesto de trabajo.

Los efectos de los Pactos de la Moncloa fueron positivos en algunos sentidos y menos en otros: la inflación acabó el año en el 26,4% contra las previsiones del 80% y en el año  1978 fue sólo del 16%, las reservas de divisas se duplicaron y las cuentas de las empresas empezaron. 

                                                                                      Continúa...